Tina Turner: las tres confesiones del documental de HBO que resumen su trágica vida

Acaba de cumplir 81 años y este será su último 'show'. A finales de marzo, la plataforma de 'streaming' estrenará el documental sobre la legendaria estrella del 'rock', cuyos graves problemas de salud han marcado sus últimos años y le han obligado a retirarse de la vida pública. Esta vez, parece que de manera definitiva. Pero antes, Tina Turner, a la que ya dedicamos uno de nuestros podcasts, quiere tener la última palabra sobre su vida. Aunque ya contó su trágica historia en sus memorias de 1986 'I, Tina', el esperado documental de HBO recoge algunas confesiones impactantes que podrían ser los titulares de las grandes tragedias de su vida.

- "Mamá no era amable conmigo. Yo no le gustaba". Su infancia, marcada por la pobreza, los abusos y su trabajo en un campo de algodón, le dejó una cicatriz para toda la vida. Igual que su relación con su madre, Zelma, que sufría violencia de género a manos de su padre y que la abandonó siendo una niña. "Mi madre solía sentarse junto a la ventana de la cocina cuando prepara la cena los domingos. Yo la solía observar. Era muy guapa. Un día, ya no estaba en la ventana. Nunca volvió. Yo la esperé, pero no regreso". Después de reconciliarse, su relación continuó siendo tóxica. "Cuando me convertí en una estrella, ella estaba contenta porque le compré una casa. Hice todas esas cosas porque era mi madre. Traté de que estuviera cómoda porque estaba sola, pero aún así yo no le gustaba", explica en el documental.

- "He tenido una vida marcada por los abusos, no hay otra forma de contar mi historia. Es la realidad, es la verdad. Es lo que hay y lo tienes que aceptar". La cantante resume así una existencia marcada, sobre todo, por su terrible matrimonio con el cantante Ike Turner, que la maltrató física y emocionalmente durante 15 años. "En el divorcio no obtuve nada. Nada de dinero, ninguna casa. Así que dije: 'Me quedaré con el nombre”, relata Turner en el 'trailer'. Su actual pareja, Erwin Bach, explica que la estrella sufre síndrome de estrés postraumático por los años de violencia que sufrió junto a su primer marido. "Tiene sueños y no son agradables. Es como cuando los soldados vuelven de la guerra".

- "Soy una niña que creció en un campo de algodón y que logró sobrevivir a la destrucción y los errores. Y aquí me tenéis". Está claro que la suya es una historia de superación con mayúsculas. Turner también ha sobrevivido al suicidio de su hijo Craig, que se quitó la vida en 2019, y una maltrecha salud que le llevó a considerar la eutanasia como única opción hace solo unos años.

En 2017 fue sometida a un trasplante de riñón que le donó su marido, el productor alemán Erwin Bach. Antes, había renunciado a la ciudadanía norteamericana para instalarse en Suiza, donde se unió a una organización que facilita el suicidio asistido. Lo contó así hace tres años en unas memorias: "Estaba sobreviviendo, pero no estaba viviendo. Empecé a pensar en la muerte. Si mis riñones no podían más y era hora de morir, estaba lista para aceptarlo. Cuando llega el momento, llega el momento". Por ahora, solo ha llegado el momento de decir adiós a sus legiones de fans.