14, Mayo, 2021

Rawdah Mohamed, la modelo que ha iniciado el movimiento #HandsOffMyHijab. Foto: Getty.
Rawdah Mohamed: una modelo contra el estado francés por el uso del 'hijab'
El eterno debate sobre el velo islámico en Francia, tiene ahora un nuevo icono en la modelo somalí-noruega Rawdah Mohamed, famosa por haber creado un movimiento, #HandsOffMyHijab, a partir de un solo 'post' de Instagram. Pero su postura también tiene muchas detractoras entre las feministas musulmanas, como la escritora hispano-marroquí Najat El Hachmi.
Ixone Díaz
El pasado 12 de abril, el senado de Francia aprobó una polémica enmienda que pretende prohibir el uso del 'hijab' en los espacios públicos a las menores de 18 años. La propuesta, que forma parte de un proyecto de ley impulsado por Emmanuel Macron para "reforzar los principios de la República", ha vuelto a poner de actualidad el eterno debate sobre el velo islámico en el país vecino. Y las mujeres musulmanas tienen un nuevo e inesperado icono en la modelo de origen somalí-noruego Rawdah Mohamed. Todo empezó con un 'post' de Instagram en el que Mohamed mostraba un mensaje de cuatro palabras en la palma de su mano: Hands Off My Hijab (Las manos fuera de mi 'hijab'). En cuestión de horas, el mensaje se convirtió en un hashtag y el hashtag en un movimiento viral que ya ha dado la vuelta al mundo.
"Creo firmemente que el único antídoto contra los delitos de odio es el activismo. Muchos gobiernos han estado en el lado equivocado de la liberación y la igualdad antes. (...) La prohibición del 'hijab' forma parte de una retórica de odio proveniente del más alto nivel del gobierno y se considerará un enorme fracaso de los valores religiosos y la igualdad”, escribía la modelo, que también utilizaba el 'post' para compartir su propia historia de discriminación. "Cuando tenía ocho años me llamaron a una reunión con mis profesores. Estaban discutiendo cómo terminar con el 'bullying' al que fui sometida por mis compañeros de clase. Su solución fue que no debía llevar el 'hijab' a la escuela. Sentarme en una habitación llena de adultos discutiendo sobre mi cuerpo me dejó más cicatrices que el acoso en sí. Nunca me había sentido tan despojada de mis derechos, tan menospreciada. Me redujeron a nada”.
También explicaba que el acoso avanzó hacia las agresiones físicas, que sus compañeros solían robarle el velo y que sus profesores llegaron a confiscárselo. Pero también que durante su carrera como modelo ha perdido innumerables oportunidades y clientes, temerosos de asociar su imagen a la polémica que rodea al 'hijab' en Francia. El país galo fue el primer país del mundo en prohibir el 'niqab' (o velo integral) en los espacios públicos en abril de 2011 y algunos municipios franceses también han vetado el uso del 'burkini' en sus playas.
"Utilicé el 'hastag' porque sentí la necesidad de humanizar el movimiento", le explicó la modelo al diario The Guardian hace unos días. Y añadía: "Quería que mis opresores vieran mi cara y la de las mujeres que se parecen a mí. No pueden esconderse en sus lujosas oficinas parlamentarias y regular el cuerpo de las mujeres sin que nosotras peleemos para evitarlo".
Sin embargo, su postura también tiene muchas detractoras entre algunas destacadas feministas musulmanas. En España, la escritora de origen marroquí Najat El Hachmi, ganadora del último premio Nadal, ha defendido exactamente la tesis contraria: que el 'hijab' no es un elemento emancipador, sino todo lo contrario y que el feminismo y la defensa del velo islámico son incompatibles porque, en muchos casos, el símbolo religioso que representa contribuye al aislamiento social de las mujeres musulmanas.
El Hachmi, que nació en Marruecos pero se crió en Cataluña, ha denunciado la persecución que sufren las actividades musulmanas que critican la imposición del velo en las redes sociales y ha explicado que el uso que se hace ahora del 'hijab' es mucho más estricto que el que se hacía hace medio siglo en países como Marruecos. De hecho, la escritora ha defendido públicamente la necesidad de que el velo se prohiba en los colegios españoles.