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By WomenNow

24, Octubre, 2022

Premios Princesa de Asturias 2022: ¿En qué consiste la economía circular que propone Ellen MacArthur?

Ellen MacArthur junto a Stella McCartney. Foto: John Phillips / Getty.

Premios Princesa de Asturias 2022: ¿En qué consiste la economía circular que propone Ellen MacArthur?

En 2010, la regatista británica Ellen MacArthur decidió abandonar el mar y crear una fundación para intentar acelerar el cambio hacia un modelo sostenible de economía circular. El 28 de octubre recogerá en Oviedo el Premio Princesa de Asturias de Cooperación Internacional 2022.

Guadalupe Rodríguez

Cuando eres la más rápida en completar la vuelta al mundo navegando sola, entiendes que la economía mundial se asemeja a una travesía en barco en la que solo dispones de una cantidad limitada de recursos. En 2010, la epifanía de Ellen MacArthur, Premio Princesa de Asturias de Cooperación Internacional 2022, le llevó a crear una fundación cuya misión consiste en acelerar la transición hacia la llamada economía circular. En 2015, MacArthur lo explicaba así en una charla TED: "Llevamos 150 años funcionando con una economía lineal: recogemos algo del suelo, lo convertimos en otra cosa y finalmente lo desechamos; sí, reciclamos una parte, pero para poder aprovecharlo más, no de forma planeada. Es una economía que no funciona a largo plazo"

La regatista profesional británica hizo historia en 2005 al completar la vuelta al mundo en solitario en el menor tiempo hasta el momento. Sus inquietudes humanitarias la llevaron ya en 2003 a crear una fundación de ayuda a jóvenes enfermos de cáncer a través de la navegación. Pero no fue hasta 2010 cuando abandonó su profesión para reciclarse laboralmente y dedicarse íntegramente a promover un ambicioso cambio de modelo.

Rediseñar la moda

Esta teoría pretende abordar desafíos actuales tan preocupantes como el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación. La economía circular, basada cada vez más en energías renovables, pretende impulsar un diseño productivo que elimine los desechos, haga circular los productos y materiales, y regenere la naturaleza con el fin de crear resiliencia y prosperidad para las empresas, el medio ambiente y la sociedad.

En el ámbito de la moda, se producen cada año millones de toneladas de prendas de vestir, que usamos un par de veces y tiramos, alentadas por la moda rápida y barata. Según los defensores de la economía circular, no es suficiente con que vendamos lo que no usamos en una 'app' de segunda mano; hay que reinventar el modelo. Esto implica desarrollar innovadores sistemas de producción, materiales y modelos de negocio que reduzcan el impacto de la moda en el medioambiente, que cada prenda dure y se utilice más tiempo y, cuando ya no la queramos, se reconvierta en otra prenda.

La Fundación Ellen MacArthur recogió estas propuestas en el informe 'Una nueva economía textil: rediseñando el futuro de la moda', germen de la campaña ‘Make Fashion Circular’, que presentó en 2018, junto con la diseñadora Stella McCartney. En este camino se hallan iniciativas como la utilización de algunas marcas de materiales naturales y biodegradables (lyocell, tencel, modal...) o bien fibras procedentes de plásticos reciclados. En este sentido, colaboran con la fundación marcas como H&M o Napapijri. La sueca ofrece a los clientes de su marca COS la recompra de sus prendas usadas, que pone a disposición de los interesados en comprarlas, o un vale de 5€ por ropa de cualquier marca en el caso de H&M. Por su parte, el fabricante italiano de prendas deportivas técnicas recompensa con un 20% de descuento a los clientes que devuelven las prendas usadas. En este segmento de moda el reciclaje se complica por la variedad de materiales que exige la necesidad de aislamiento o impermeabilización y solo un 1% se reconvierten en otras prendas. Por ello, Napapijri ha simplificado sus diseños para utilizar solo un polímero tanto en tejidos como rellenos y costuras.

Alimentación circular

El debate de cómo se produce la comida es de sobra conocido: granjas y cultivos industriales que contaminan el agua y el medio ambiente, además de un desperdicio de alimentos que alcanza un tercio de lo producido mientras un 10% de la población mundial pasa hambre. Cambiar a una economía circular implica ayudar a combatir el cambio climático, fomentar la biodiversidad y mejorar la salud a través de una alimentación más natural. Los principios sobre los que se asienta este cambio son que el sistema no genere desperdicio y que las tierras de cultivo vuelvan a ser ecosistemas naturales, con pastoreo rotativo y cultivo de árboles alrededor de las tierras de labranza. La economía circular también promueve la redistribución de los excedentes y la reconversión de los subproductos alimentarios y los desechos.

Muy relacionado con la comida, la economía circular replantea, asimismo, el modo en el que diseñamos, utilizamos y reutilizamos los plásticos. Eliminar (todos los plásticos innecesarios), innovar (que sean reutilizables, reciclables y compostables) y hacerlos circular (para que no acaben en espacios naturales) son los principios que defiende.

Estas son algunas de las propuestas que impulsa la Fundación Ellen MacArthur, en colaboración con el Foro Económico Mundial, entre otras instituciones, empresas y gobiernos. Su objetivo: lograr para todos un planeta con menos desechos y contaminación, donde los productos y materiales circulen y permitan a la naturaleza regenerarse, a través del aprovechamiento de los recursos, como la regatista aprendió en medio del infinito océano.

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