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¡Pasajeros al tren! Un recorrido sobre raíles por los paisajes más increíbles de Europa

Los mejores viajes en tren. Foto: Getty

¡Pasajeros al tren! Un recorrido sobre raíles por los paisajes más increíbles de Europa

De España a Suiza pasando por Reino Unido, Alemania o Francia. Los viajes en tren de este reportaje son un destino turístico en sí mismo. 'Suites' acogedoras, restaurantes deliciosos, servicio exquisito y los paisajes más increíbles en un entorno de lujo. Los trenes son para el verano.

Carolina Rodríguez

Hay muchas formas de viajar, pero descubrir los encantos de un país desde la ventanilla de un tren no tiene parangón. Si además el tren donde viajas resulta tan acogedor como el mejor hotel de lujo y tan delicioso como el último restaurante de moda, no lo dudes. Te proponemos algunos recorridos que son un destino en sí mismo. De España a Suiza, pasando por Alemania, Noruega o Francia, estos son los trenes turísticos de lujo más antiguos (y fascinantes) de Europa.

1. El Transcantábrico (España)

Comenzamos por el presentante nacional de la lista. Casi 700 kilómetros separan San Sebastián y Santiago de Compostela, el trayecto que recorre el tren turístico más antiguo de España: el Transcantábrico. Ocho días y siete noches para visitar lugares tan maravillosos como Santander, Oviedo, Gijón o Bilbao, así como disfrutar durante el trayecto de infinitas montañas verdes a la izquierda y la inmensidad del mar cantábrico a la derecha. También existe la posibilidad de parar a ver iconos de nuestro patrimonio nacional como los Picos de Europa o las Cuevas de Altamira. Decorado de manera clásica y elegante, el tren ofrece alojamiento y restaurante. 

2. Glacier Express (Suiza)

Las ciudades suizas de Zermatt y St. Moritz, cada una en un extremo de los Alpes y separadas por 275 km, están unidas por este famoso tren panorámico que recorre el corazón de esta poderosa cadena de montañas. El trayecto dura unas 7,5 horas, atraviesa 91 túneles, 291 puentes y cruza el paso del Oberalp de 2.033 metros de altura. Este tren turístico funciona desde 1930 y es conocido como "el tren más lento del mundo". Pero, ¿qué más da cuando lo que importa no es llegar a toda prisa a tu destino? Los vagones son panorámicos –con amplios ventanales para observar el entorno– y el pasajero recibe unos audífonos con los que escuchar información histórica y descriptiva del recorrido. Atención en Zermatt, donde se erige el pico Cervino, un monolito inconmensurable del que es imposible apartar la vista.     

3. The Jacobite Train (Escocia)

Si consigues encontrar el andén 9 y tres cuartos ya sabes qué viene después: podrás subir a bordo del Hogwarts Express. No, no es broma. El tren de Harry Potter existe y está mucho más a tu alcance de lo que crees. Es el tren de vapor Jacobite, en Escocia. Al contrario que en la película, el tren no sale de Londres sino de Fort William a Mallaig, al norte de Escocia. Lo que no cambia son los espectaculares paisajes de la ruta, que atraviesa campos del característico verde escocés, con playas y castillos espectaculares que harán de la ruta una travesía mágica. 

4. Cinque Terre Express (Italia)

Esta travesía en el norte de Italia recorre siete ciudades: parte de Levanto, parando en Monterosso al Mare, Vernazza, Corniglia, Manarola y Riomaggiore para terminar en La Spezia. El viaje es una buena forma de conocer esa zona de Italia, repleta de pueblecitos costeros con sus casas pintadas de colores  intactos al paso del tiempo y las oleadas de turistas. Una preciosa ruta que ofrece unas vistas al mar impagables.

5. El tren amarillo (Francia)

Si en España el vehículo amarillo más conocido es el tractor, en Francia podría decirse que es un tren. Le train jaune –compuesto por cinco vagones, incluido uno descapotado que es el más famoso–, recorre el trayecto desde Latour de Carol hasta Villefranche-de-Conflent, en los Pirineos, las vías más elevadas de Francia que llegan a sobrepasar los 1.500 metros de altura. Imagínate los paisajes.  

6. El tren de Flam (Noruega)

El fiordo Sognefhorden –el más largo y alto de Europa– esconde un secreto: The Flam Railway. Su construcción comenzó en 1923 y se completó en 1940 y se dice que es una de las mayores hazañas de la ingeniería de Noruega. Catalogado en 2014 como el tren más bonito del mundo según la prestigiosa guía de viajes 'Lonely Planet', recorre 20 km en un hora y es una de las principales atracciones turísticas de Noruega. No es para menos; el tren va desde el nivel del mar del Aurlandsfjord de Flam hasta la estación de montaña de Myrdal, a 867 metros. En medio, una parada de cinco minutos en la cascada de Kjosfossen, donde podrá bajarse y salir al andén.

7. Tren Selva Negra (Alemania)

Si al oír Selva Negra se te hace la boca agua pensando en una tarta, es que no conoces el bosque que fue fuente de inspiración para los hermanos Grimm y recibe el mismo nombre. Con mucho encanto, el bosque es, de hecho, todo lo que se espera de un cuento de hadas: árboles centenarios que forman densos bosques con villas que, ocasionalmente, se intercalan con la vegetación. Pero no hace falta que te guste el senderismo para visitarlo, pues gracias a este tren podrás apreciar sus paisajes con solo asomarte a la ventanilla.

¡Extra! Si tu idea es saltar de continente, no puedes perderte el Belmond Andean Explorer, un moderno tren que recorre los espléndidos paisajes de los Andes peruanos sin renunciar al lujo.

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