De 'The white Lotus' a ‘Nine perfect strangers': la industria del wellness en el punto de mira

Ixone Díaz

Nueve perfectos desconocidos, sus respectivos traumas y las misteriosas razones que les llevan a gastarse una ridícula fortuna en una estancia reparadora de diez días. Un 'resort' de lujo (y sofisticadísimo diseño) en la costa de California. Una gurú de belleza extraterrestre, elegancia inasequible, intenciones inescrutables y marcado acento ruso. Mucha charla motivacional, extraños ejercicios espirituales, smoothies saludables y emociones a flor de piel. Y todo impregnado de un terrible aroma a secta peligrosa . Así es 'Nine perfect strangers' , que acaba de estrenarse en Amazon Prime , que tiene a Nicole Kidman (la susodicha líder inquietante) como protagonista y que se suma a la lista de estrenos de este verano, en la que Netflix ha apostado por  coquetear con el porno para mamás y el romanticismo más old school y abonado a los estereotipos.

Basada en el libro homónimo de Liane Moriarty , creada por el todopoderoso David E. Kelley y con un reparto de relumbrón (Kidman comparte retiro con Melissa McCarthy , Michael Shannon , Regina Hall , Luke Evans o Bobby Cannavale ) lo más interesante de esta nueva ficción (que ha sido, todo hay que decirlo, masacrada por parte de la prensa especializada) es su crítica descarnada a la industria del wellness,  un negocio que, según el Global Wellness Institute, mueve 4,5 billones de dólares al año .

"Todos buscamos esa solución rápida y fácil que nos hará mejores personas y más felices. Y la ridiculez inherente a esa búsqueda me resulta muy interesante y divertida", ha explicado el director de la serie Jonathan Levine.

Entre la sátira y el thriller (¿quién sabe qué pasa por la cabeza de la misteriosa Masha o cuáles son sus intenciones?) 'Nine perfect strangers' se une al éxito de HBO 'The White Lotus' , convertida en la serie del verano por su crítica despiadada y cargada de mala leche sobre los huéspedes de un lujoso complejo turístico en Hawaii , que pasan sus días entre masajes, tratamientos de belleza, tumbonas a los pies de la piscina y conversaciones intrascendentes. Un poco menos atormentados e inquietantes que los discípulos de Kidman, en el fondo arrastran traumas parecidos, aunque los afrontan con un poco más sentido del humor y bastante menos melodrama.

Las dos ficciones confirman algo que, por otra parte, ya sabíamos: los ricos y sus costumbres nos fascinan . Igual que los mundos opulentos que habitan y que no impiden que, como todo hijo de vecino, también sufran, tengan problemas y, a su manera, busquen soluciones. A menudo, en las (falsas) promesas de la industria del wellness. Y estamos de suerte: HBO acaba de confirmar que la tercera temporada de 'Succesion' se estrenará en octubre.