27, Julio, 2022

Nancy Pelosi. Foto: Getty.
Por qué Nancy Pelosi puede hacer estallar la tensa relación entre China y Estados Unidos
La polémica lleva semanas coleando. La rumoreada visita de la presidenta de la Cámara de Representantes a Taiwán, que podría suceder en agosto, amenaza con hacer estallar la frágil relación diplomática entre Estados Unidos y China. ¿Qué se propone Nancy Pelosi?
Ixone Díaz
En cuestión de horas, la tensión geopolítica entre China y Estados Unidos ha escalado y derivado en amenazas. "Tendrá consecuencias serias. Y Estados Unidos será responsable", ha dicho el portavoz del ministerio de exteriores chino acerca de la rumoreada, aunque nunca confirmada, visita de Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representes de Estados Unidos, a Taiwán. Otro portavoz del gobierno de Pekín, esta vez del ministerio de defensa, sugería que podría haber, incluso, una respuesta militar. De producirse sería la visita del político norteamericano de más alto rango desde 1997. Y llegaría en un momento particularmente complicado en las relaciones entre ambas potencias con la guerra entre Rusia y Ucrania de fondo.
Tanto es así que, según la CNN, la administración Biden quiere disuadir a Pelosi de sus planes. "El ejército piensa que no es una buena idea", explicó el propio Biden hace unos días ante los periodistas. Pero la retórica china se ha encargado de disparar la tensión entre las dos administraciones. No es, claro, un conflicto nuevo.
China considera a Taiwán una provincia rebelde que debe volver a formar parte de su territorio y en más de una ocasión ha amenazado con anexionarla por la fuerza. Estados Unidos, por su parte, mantiene una relación ambigua con la isla que definen como "robusta, pero no oficial", aunque en el último año Biden ha dicho hasta en tres ocasiones que si hubiera cualquier intento por parte de China de tomar el territorio, Estados Unidos estaría dispuesta a intervenir. Su administración se ha ocupado de matizar sus declaraciones.
Pero, ¿por qué quiere Pelosi visitar Taiwán precisamente ahora? El viaje iba a suceder en abril, pero finalmente se pospuso cuando la líder del partido demócrata dio positivo en Covid-19. La oposición de Pelosi al régimen de Pekín tampoco es nada nuevo. La actual presidenta de la Cámara de Representantes ha denunciado en numerosas ocasiones la falta de derechos humanos en China, se ha reunido con disidentes políticos y en los 90, visitó la plaza de Tiananmén para conmemorar la masacre sucedida allí en 1989. En 2019, Pelosi también asistió a la inauguración en Washington de una estatua dedicada al hombre que se enfrentó a los tanques del ejército chino, protagonizando una de las imágenes más icónicas del siglo XX.
Además, como presidenta de la Cámara de Representantes, Pelosi representa el sentir mayoritario de los senadores y congresistas, tanto demócratas como republicanos, acerca de la posición respecto a Taiwán, cuyo presidenta, Tsai Ing-wen, reclama desde hace tiempo una intervención norteamericana más contundente en el conflicto.
A sus 82 años, con una trayectoria política de más de medio siglo a sus espaldas y 35 años como congresista, Pelosi tendrá que anunciar en otoño sus intenciones de cara a las elecciones legislativas de noviembre. Si se presentará o no y si querrá mantener su posición como líder del partido demócrata en la cámara. Lo que parece claro es que Nancy Pelosi no se deja intimidar por nadie. Ni siquiera por una potencia militar. A las dudas expresadas por Biden, Pelosi respondía con osadía: "Creo que lo que dijo el presidente es que tal vez los militares tienen miedo de que mi avión sea derribado o algo así. No lo sé exactamente". El viaje podría ocurrir en agosto. Las consecuencias son imprevisibles.