Eventos inspiradores Actualidad imprescindible Voces extraordinarias

Te interesa

Secuestrada, juzgada y encarcelada. El precio de ser modelo (y mujer) en Yemen

Intisar Al-Hammadi.

Secuestrada, juzgada y encarcelada. El precio de ser modelo (y mujer) en Yemen

Y todo por posar sin velo en un puñado de fotografías. La modelo yemení Intisar Al-Hammadi tiene 20 años y está encarcelada, después de un juicio plagado de irregularidades, en una prisión de Yemen, donde ha intentado suicidarse. Amnistía Internacional exige su liberación inmediata.

Ixone Díaz

Había conseguido lo que sus padres le dijeron que sería imposible: ser modelo y actriz en un país de moral ultraconservadora como Yemen. Intisar Al-Hammadi, de 20 años, conquistó cierta popularidad en su país después de que un amigo fotógrafo publicara varias imágenes suyas posando con trajes tradicionales yemenís en las redes sociales. Durante cuatro años, trabajó como modelo y protagonizó un par de papeles en series de televisión. Era lo que siempre había querido hacer. Desde que, siendo una niña, imitaba a las modelos que veía en la tele y asaltaba el armario de su madre para probarse su ropa. Su sueño se truncó en febrero, cuando las milicias integristas hutíes la detuvieron y la acusaron de desafiar los estrictos códigos morales del país con su comportamiento. Su caso recuerda poderosamente al de Loujain al Hathloul, la activista que pasó 1.000 días en una prisión de Arabia Saudita después de lograr que las mujeres puedan conducir en el país árabe.

El calvario de Al-Hammadi empezó en febrero, cuando se dirigía a una sesión de fotos con unos amigos y fue detenida en un control militar de carretera. En realidad, se trató de un secuestro. Las milicias integristas hutíes, que controlan la capital y el norte del país, la retuvieron de manera arbitraria tras requisar su teléfono y comprobar que contenía fotografías en las que la modelo posaba sin el tradicional velo. 

En abril, fue juzgada y condenada por "indecencia" en un proceso plagado de irregularidades, en el que también se le acusó sin pruebas de prostitución y tráfico de drogas. Desde entonces, cumple sentencia en una de las peores prisiones del país. Su abogado ha denunciado que ha sido sometida a abusos, ha recibido insultos como "puta" o "esclava" por parte de los trabajadores de la prisión y ha sido obligada a firmar una confesión falsa con los ojos vendados. Aunque también amenazaron con someterla a un test de virginidad, la presión de organizaciones como Amnistía Internacional consiguió evitarlo.

Hace unos días, Al-Hammadi trató de suicidarse cuando fue informada de que las autoridades penitenciarias pretendían trasladarla a una cárcel donde solo cumplen condena las mujeres acusadas de prostitución. Un niño que acompañaba a su madre en prisión alertó a los guardas al verla colgada en su celda. Desde entonces, la modelo, que estaba en estado crítico, recibe asistencia hospitalaria.

"El juicio injusto de las autoridades hutíes contra Intisar Al-Hammadi, además de su arresto arbitrario, es un recordatorio de los abusos a los que se enfrentan las mujeres a manos de las autoridades de Yemen", ha dicho Michael Page, representante de Human Rights Watch en Oriente Medio.

La guerra civil en el país estalló en 2014 y ya se ha cobrado más de 18.000 víctimas civiles. Desde entonces, Yemen es un estado fallido en el que las milicias integristas controlan gran parte del territorio y las mujeres sufren persecución, violencia y son encarceladas por violar los estrictos códigos morales que todavía imperan en el país.

TE INTERESA

NO TE PIERDAS