Jill Biden: nueva primera dama de Estados Unidos y una profesora que seguirá dando clase incluso tras llegar a la Casa Blanca

La victoria del partido demócrata ha supuesto la proclamación de la  primera vicepresidenta en la historia de EEUU: Kamala Harris, además de la esperada derrota de Trump -deseada por personalidades como Sharon Stone, Kirsten Gillibrand, Eva Longoria, Taylor Swift, e incluso su propia sobrina, Mary Trump-. Pero eso no es todo. Jill Biden, la nueva primera dama, tiene previsto mantener su trabajo de profesora cuando llegue a la Casa Blanca el próximo 20 de enero, algo que hasta ahora no ha hecho ninguna de sus antecesoras.

Nacida en Nueva Jersey hace 69 años, Jill Biden da clases de inglés en la universidad comunitaria de Virginia, aunque actualmente se encuentra en excedencia para hacer campaña junto a su marido,  Joe Biden.  La nueva primera dama tiene un doctorado y dos másteres en Educación y lleva 36 años dedicándose a la docencia. No obstante, le apasiona tanto que nunca la ha dejado, ni siquiera en los ocho años en los que fue segunda dama durante los dos mandatos de Barack Obama. Solamente interrumpió su profesión cuando tuvo a su hija Ashley en 1981 y durante la reciente campaña electoral al lado de su marido. "Siempre está corrigiendo exámenes", destacó una vez Michelle Obama.

Algunos analistas destacan la complejidad de compaginar su cargo político con la enseñanza pero, de cumplirse sus aspiraciones, y vista su enorme implicación en la campaña electoral de los demócratas, promete convertirse en una primera dama inspiradora y enormemente trabajadora.

Jill Biden: más sobre la nueva primera dama  

Jill Tracy Biden (de soltera Jacobs ) nació el 3 de junio de 1951 en Nueva Jersey, pero se crió cerca de Philadelphia. De origen italiano (su abuelo cambió el apellido original, Giacoppo, por Jacobs), estudió en la Universidad de Delaware y estuvo casada entre 1970 y 1975.

Tras el divorcio de Jill, y tres años después de la tragedia que golpeó a un joven Joe Biden, cuando su primera esposa y su hija de un año murieron en un accidente de coche, la futura pareja presidencial se conoció en una cita a ciegas. "Ella me devolvió la vida", confiesa Joe en sus memorias . Para ese entonces, él tenía dos hijos aún pequeños que sobrevivieron al accidente, Beau y Hunter, que fueron quienes le sugirieron que se casara con Jill. Aun así, ella no aceptó casarse hasta 1977, tras cinco peticiones de mano por parte de Joe.