7, Abril, 2022

Eliminar reuniones aumenta la productividad. Foto: Getty
Propónselo a tu jefa: limitar las reuniones a dos días a la semana aumenta la productividad
El teletrabajo y las múltiples plataformas digitales han disparado el número de reuniones. Pero no siempre son eficaces ni necesarias. Así lo asegura un estudio del Instituto Tecnológico de Massachusetts que afirma que tener muchas desconcentra y resta valor a la colaboración efectiva.
Elena de los Ríos
Ahora mismo, muchas compañías españolas experimentan con la llamada oficina híbrida, una combinación de presencialidad y teletrabajo en distintas modalidades. Este ajuste va a ser, probablemente, el reto que más va a ocupar a los departamentos de recursos humanos en 2022, un cambio de paradigma que puede eclipsar cuestiones que afectan, acaso más, a la productividad de los empleados. Hablamos de las reuniones, multiplicadas exponencialmente durante la pandemia y postpandemia gracias a las plataformas digitales. Ahora que nos estamos replanteando tan a fondo la rutina laboral, es el momento de poner la agenda de reuniones encima de la mesa. Y con datos.
Gestionar la oficina híbrida –que combina la presencialidad y el teletrabajo– es el gran reto de Recursos Humanos para 2022
Un experimento del prestigioso Instituto Tecnológico de Massachusetts ha desvelado lo que muchas ya intuíamos. Al eliminar las reuniones en 76 empresas de más de 1.000 trabajadores durante tres días a la semana, las compañías aumentaron su productividad hasta un 73%. Más aún: los empleados redujeron su nivel de estrés hasta un 57% y aumentaron su satisfacción al respecto de su trabajo un 65%. "Tener demasiadas reuniones resta valor a la colaboración efectiva y desconcentra a los trabajadores en sus horas más productivas. Nuestra conclusión es que el número óptimo de días libres es de tres, dejando dos disponibles para estos encuentros por dos razones: mantener las conexiones sociales y administrar los horarios semanales", señalan los autores del estudio.
La comunicación entre empleados y jefes tiene que ser fluida, algo que permiten herramientas de gestión como Slack o Trello
Por supuesto, esta reducción drástica de las reuniones en la oficina tiene que compensarse con otras metodologías, una tarea en la que de nuevo vienen en nuestra ayuda las nuevas tecnologías. La comunicación entre empleados y jefes tiene que ser fluida, algo que permiten herramientas de gestión como Slack o Trello. Otro punto a su favor: en estos espacios las instrucciones y tareas quedan por escrito, por lo que los malentendidos son imposibles. Para aclaraciones siempre nos queda el correo electrónico, otro aliado frente a las reuniones del que tampoco conviene abusar. No queremos librarnos de unas para terminar amarradas a los buzones digitales.