'Guía astrológica para corazones rotos': Netflix, amor y horóscopo. ¿Se le puede pedir más a un placer culpable?

Carmen Raya.

Si Netflix ya ha demostrado en más de una ocasión que los libros escritos por mujeres, como Dolores Redondo o Elísabet Benavent, son una de las mejores fuentes de inspiración para sus series más vistas, con Guía astrológica para corazones rotos el gigante del streaming audiovisual ha vuelto a repetir fórmula, y éxito.

Mientras el mundo hablaba sobre El juego del calamar o YOU, esta serie italiana basada en la novela homónima escrita por Silvia Zucca se colaba sigilosamente en el top ten de lo más visto en Netflix España. Y es que si unes amor y horóscopo en una serie cuya protagonista recuerda, sospechosamente, a Zooey Deschanel en su papel de New Girl... ¿Qué puede salir mal?

Aunque quizá lo que haya hecho de Guía astrológica para corazones rotos todo un fenómeno sea que Mercurio estaba retrógrado cuando se estrenó. Y no, no estamos diciendo ninguna locura. ¿Por qué?

Porque esta serie italiana gira en torno a la vida de Alice, una asistente de producción del signo de Libra. Ante la inminente boda de su expareja Carlo, que espera su primer hijo con una compañera de trabajo, la joven cae en una importante depresión, pero la llegada de un nuevo jefe (desconocemos su signo zodiacal) cambiará no solo su vida profesional, sino también su visión sobre el amor. Aunque lo que trastocará por completo su vida amorosa será su amistad con un gurú astrológico, que la llevará a plantearse si su carta astral está marcando su destino sentimental.

Aunque Netflix todavía no ha confirmado si habrá segunda temporada,  la primera solo cuenta con seis episodios de 30 minutos y cubre los seis primeros signos del zodiaco: de Aries a Virgo. Para conocer el desenlace de esta curiosa historia de amores astrales faltarían otro seis: de Libra a Piscis.

¿Por qué deberías verla? 

No vamos a mentirte: Guía astrológica para corazones rotos es un placer culpable y de los buenos. No ganará Globos de Oro ni Emmys como Gambito de Dama, eso está claro, pero tampoco lo pretende. Y sin embargo, su apuesta por el entretenimiento sin trampa ni cartón ha sabido combinar el interés renovado de los millenials y centennials por el horóscopo y la astrología con la fiebre romántica de series como Un lugar para soñar. Por eso, esta serie se devora en un día y, aunque servidora no quiera admitirlo, te deja con ganas de más.

Por no hablar de la preciosa casa de la protagonista (a pesar de estar a punto de perder su trabajo), su vestuario vintage, su amiga casada con un bebé que, pese a eso, siempre está ahí para ella, sus amantes (cada uno más guapo que el anterior) y su disfuncional relación con sus padres, que ya han convertido su antigua habitación en un estudio de pintura y que, aunque la quieren, no le dejarán volver al hogar familiar si se queda en el paro.

Que el horóscopo, y Netflix, nos acompañen siempre en nuestros guilty pleasures.