Piscina
Para acceder a este campus gratuito, nadie debe preocuparse si no sabe nada de programación. Muchos no tenían ni idea antes de comenzar y ahora se sorprenden haciendo algo que nunca habrían imaginado. Solo hay que aprobar dos test de habilidades online y, después, el mayor reto: un período de selección presencial de 26 días consecutivos. Es lo que llaman ‘piscina’. En esta fase, con el objetivo de fomentar las vocaciones STEAM entre las mujeres, 42 reserva un 30% de plazas exclusivo para este colectivo.
“Durante la piscina me enamoré del proyecto”, cuenta Carlos, estudiante de 29 años. No hace falta saber programar, solo atreverse a intentarlo. Es una inmersión total en el mundo del código. Los piscineros que mejor nadan enseñan a los que menos saben y entre todos tratan de llegar hasta el final. “Es muy duro, pero tan intenso que supone un antes y un después en tu vida. Es una experiencia reveladora”, confiesa.